Nuestra comunidad sigue esperando oportunidades para que podamos salir adelante, dejando atrás el reinado de los dirigentes político sindicales, que se creen los dueños de todo, con derecho a decir quien es nombrado, quitado, trasladado o despedido.
El proyecto de modernización de Japdeva representa una gran opción para la juventud caribeña desempleada o malempleada en las explotaciones bananeras, tan tradicionales y poderosas en la zona.
Hace unos días escribí un artículo sobre la extraña comunión de objetivos entre el sindicato y las bananeras que se oponen a la conceción de Moín, para mi asombro el reconocido bloguero el Chamuko destapó que también están pagando para malinformar del proyecto en redes sociales.
Esta noticia me causó impacto porque ingenuamente creí que internet era un espacio para conversación entre ciudadanos, sin embargo me impresionó leer que los bananeros aceptan estar comprando opiniones para su causa.
En la página de facebook contra la concesión actualizaron el estado hablando de los bananeros en primera persona, aceptando que ellos están detrás de esa página, esta es la imagen:
Me repugna que estas cosas se den porque es una falta de lealtad, inventaron un espacio para fingir ser otros pero cuando se vieron descubiertos no tuvieron vergüenza en decir la verdad. Esto está mal pero se puede enmendar con sinceridad, que los bananeros ahora digan por qué se oponen al progreso de la provincia, pero que no sigan diciendo mentiras, que digan las cosas como.
Soy de los que creen la versión de que los bananeros grandes prefieren las cosas como están para garantizarse el negocio con sus megagrúas, pero sería bueno que ellos nos digan si esto es o no verdad.
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